Writober Literart: Miedo

 

La cerradura emitió un leve chasquido al girar la llave, luego abrí la puerta y la cerré a mi paso. Me quité los zapatos de tacón nada más entré, era increíble cómo un acto tan sencillo podía ser tan placentero. Después de un día tan duro de trabajo, lo único que quería era ponerme el pijama y comer algo calentito mientras veía una película en el sofá.

Algo llamó mi atención desde la sala, y es que había un brillo cambiante, como si estuviese la televisión puesta ¿me la habría dejado encendida? Tan solo la posibilidad me extrañó, ya que apenas desayunaba y me marchaba al trabajo cada mañana, pero tampoco le di importancia, estaba tan cansada que solo ansiaba envolverme en el pijama más calentito que tuviese, así que crucé el pasillo rumbo a mi habitación.

Lo que vi nada más entrar, me dejó helada. Por toda la estancia había pegadas un montón de fotos mías haciendo distintas cosas en casa, desde colgando la ropa hasta bañándome. Lo primero que se me ocurrió fue que alguien tenía que haber entrado sin mi permiso, pero ¿cómo era que yo no me había enterado? La cerradura nunca me pareció forzada y siempre me aseguraba de que las puertas y ventanas estuviesen cerradas ¿cómo podía ser?

Una idea cruzó mi mente como un rayo. Si la televisión estaba encendida ¿eso significaba que seguía aquí? Pensé rápidamente si lo mejor era correr hacia la puerta o coger un cuchillo de la cocina por el camino por lo que pudiese pasar, sin embargo, fui lenta en mi toma de decisiones, ya que una silueta apareció tras de mí, provocando que se me encogiese el estómago del miedo, del terror de sentirme en una vía muerta, sin salida posible y a merced de un total desconocido.