LITERARTOBER 2021: Pozo

 

Me había quedado dormitando en el sofá viendo la tele y mi mente se había quedado bailando entre el sueño y la vigilia mientras mi cuerpo se fundía con el sofá, hundiéndose en él. Pude oír un chapoteo en el patio colindante al salón, a todas luces procedente del pozo que ahí había, pero no le di mayor importancia y seguí centrada en el ruido blanco que ahora era la tele. Un sonido anormal me sacó de mi ensimismamiento, sin embargo, no del sopor. Era como algo viscoso deslizándose, arrastrándose a unos pocos metros.

Abrí los ojos con nerviosismo para contemplar un humanoide extraño, lleno de barro, liquen y ojos brillantes que me miraban con fijeza mientras avanzaba en mi dirección con cierta parsimonia. Un escalofrío me recorrió el espinazo, pero mi cuerpo no respondió cuando quise moverme, así que tuve que contemplar, mientras luchaba en mi fuero interno, cómo ese extraño se situaba a un palmo de mi cara, me olfateaba y pasaba su larga y resbaladiza lengua por mi cara.

Me desperté de golpe y sudada, pero tranquila por comprobar que había sido una extraña pesadilla. Pasé mi mano por la zona de la cara en la que aún notaba su aliento caliente para descubrir con inquietud que estaba mojada. Descarté mis miedos y me aproximé con valor hacia el pozo para deshacerme de los malos pensamientos sin embargo, una extraña visión en su fondo. El cadáver pálido, ensangrentado y embarrado de una chica me devolvía la mirada mientras reposaba con una postura antinatural.