Silencio, mi cuento empieza - Monstruo

Eres un monstruo, uno bien feo y rechoncho. Perdiste la poca humanidad que te quedaba hace mucho, pero demasiado tiempo. Estás muerto por dentro sólo eres un mísero cascarón vacío que se arrastra por el mundo, tu interior, y desde hace tiempo exterior porque es un rastro mugriento el que dejas a tu paso, es un montón de putrefacción de lo que fuiste, de lo que podías haber sido y nunca serás. Pero el mundo está ciego, no puede ver lo que eres en realidad ni oler tu hedor porque tan solo visualiza lo superficial, lo elocuente que puedes legar a ser para conseguir lo que quieres.
Eres un monstruo, desde hace tanto que cuesta creer que hayas podido ser humano alguna vez, pero hasta los peores engendros antaño lo fueron porque nadie nace así, uno siempre decide su camino en la vida, lástima no sea para bien en cada oportunidad de elección.
Eres un monstruo, además avaricioso en grado sumo, no te importa lo que destroces si es para tu propio beneficio, te parecen irrelevantes las vidas que arranques a tu paso si con ello tienes una satisfacción más, en realidad si hay alguien roto aquí, ese eres tú.
Eres un monstruo, pero uno cobarde, sí, eres muy cobarde porque actúas en la sombra y atacas a quienes no se pueden defender de ti para luego volver a tu interpretación de ser humano inocente y ofendido si se te acusa de tus crímenes.
Es curioso el mundo en el que vivimos, los monstruos caminan a sus anchas por la calle, como reyes del mismo, buscando nuevas víctimas mientras el resto se tapa los ojos, mientras que los pobres cadáveres que dejan a su paso incluso son acusados de mentirosos, se les llega a ver también como incitadores de su propia muerte a manos de esos seres despreciables, se les acusa y deja indefensos para que acaben sus últimos días temerosos y desprotegidos.
Es curioso el mundo en el que vivimos en el cual los monstruos pueden vivir tranquilos, sabedores de que son intocables, mientras que sus víctimas están llenas de terrores, sin posibilidad de justicia ni capacidad de clamar venganza.





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